Te juro, hija mía,
que te voy a querer siempre,
sin ninguna condición,
sin pedir tu amor a cambio.
Jamás seré una ausencia,
si tú me necesitas;
jamás seré un reproche,
si tú pides mi ayuda.
Para tus besos,
tendrás mis besos;
junto a tus lágrimas,
caerán mis lágrimas.
Y abrazaré sin dudar la muerte,
antes de ser yo quien te cause dolor.
lunes, 1 de octubre de 2012
A mi hija.
viernes, 1 de junio de 2012
miércoles, 16 de mayo de 2012
Suscribirse a:
Entradas (Atom)